Ayer Nacho Cáceres dio una lección de coraje al acabar el Maratón de San Sebastián a pesar de que una lesión en el pie no le permitió estar en su nivel habitual. Nacho decidió sufrir, acabar la carrera en 2:23 y sentirse otra vez maratoniano. «Me debía a mi mismo acabar un Maratón» A veces las mejores lecciones las aprendemos en los momentos difíciles. Desde Cárnicas Serrano queremos mostrar nuestro orgullo por este tipo de gestos que engrandecen a este deporte
nacho caceres